Es el tratamiento más revolucionario en el rejuvenicimiento estético facial NO QUIRÚRGICO. Consiste en un
ultrasonido microfocalizado que actúa por medio de Termo-coagulación, provocando regeneración de colágeno
mediante un proceso biológico.
Es un método sin cicatrices, sin dolor y sin tiempo de recuperación. El
resultado empieza notarse a las 2 meses de realizado el procedimiento y se establece completamente a los 6
meses.
Está indicado como mantenimiento para los pacientes que se efectuaron la cirugía facial, para
quienes tienen temor a la cirugía, para aquellos que no disponen de tiempo de recuperación por sus labores
cotidianas o los pacientes que por sus enfermedades coexistentes no son candidatos a la cirugía.
Una forma diluida de la toxina botulínica tipo A, se considera hoy en día que es uno de los métodos que ofrece buenos resultados para el tratamiento de las arrugas. Esta forma de toxina botulínica, tras su infiltración con una aguja extra fina en el músculo debajo de la piel de la zona que se desea tratar, actúa relajando el movimiento muscular. Con este efecto se pretende que desaparezcan las arrugas y por tanto proporcionar un aspecto más juvenil en la piel. Tiene una duración temporal, entre 3 a 6 meses, lapso después del cual debe renovarse la dosis. Rara vez se han dado casos de efectos secundarios como reacciones alérgicas, rigidez facial o náuseas. La marca comercial más conocida de esta forma de toxina botulinica cosmética es Botox®, aunque existen otras marcas en el mercado como Xeomin.
Es un tratamiento innovador para el rejuvenecimiento cutáneo y el más revolucionario de la cirugía
dermocosmética, siendo su gran ventaja, al no ser método invasivo, el permitir la incorporación inmediata
a la actividad cotidiana.
Las indicaciones básicas de este procedimiento son:
• Rejuvenecimiento facial
• Secuelas de acné
• Mejoramiento de cicatrices en cualquier parte del cuerpo
• Mejoramiento de las líneas de expresión y arrugas
• Pigmentos cutáneos
• Mejora la textura cutánea
Un efecto a mediano plazo es el recambio de colágeno, lo que conlleva a un aspecto cutáneo
rejuvenecido.
En los casos de secuelas de acné, hiperpigmentación (manchas) de la piel o cambio de textura cutánea,
siempre es la primera línea de tratamiento. Así como para el rejuvenecimiento facial, cuando las
estructuras de soporte facial no han perdido su elasticidad y sin embargo presentan signos de daño cutáneo
por exposición solar asociado a un tipo de piel más sensible. En el caso de complemento de una cirugía es
ideal luego de un lifting facial para coadyuvar a mejores resultados donde la cirugía tiene sus límites,
por ejemplo en el área peribucal y en líneas de expresión alrededor de los ojos (patas de gallo).
Son sustancias aprobadas para suplir el volumen de tejidos que se han ido perdiendo por el proceso de
envejecimiento, con secuelas de algún accidente o como consecuencia de alguna enfermedad degenerativa.
Normalmente se utilizan productos a base de Ácido Hialurónico o Hidroxiapatita de Calcio, que son los
únicos aprobados para este efecto, se pueden utilizara para:
• Arrugas y líneas de
envejecimiento
• Surcos profundos
• Cicatrices de acné